Ruta 3: Meandros del Tajuña

Distancia total: 6 km.

Dificultad: media.

Duración total: 120 minutos (se incluyen paradas de interpretación).

Comienza en la Senda de Carrabanades, al sur de Luzaga, de fácil acceso. Asciende por un paisaje de forestas aclaadas, de encimas y quejigos, con mosaico de matorrales seriales y pastizales entre los que se salpican la sabina albar y el enebro. Alcanza los escarpes calizos del Tajuña, con bellas vistas sobre el relieve en el entorno de la Ermita de San Roque; una corta aproximación por la carretera GU- 952 permite la observación de la Peña del Búho, con presencia de aves propias de los roqueados. De regreso, remontando el Tajuña, el senderista descubre nogales tortuosos, riberas naturales de gran singularidad, con abundantes arces de Montpellier, y el viejo Molino de Albalate.

Este paisaje fluvial nos permite contemplar los restos de la torre de Albalate, testigo mudo de las luchas medievales entre musulmanes y cristianos, de las guerras civiles castellanas y de los conflictos sociales en la Edad Moderna.

Qué ver en esta ruta:

  • Zona de espinos y plantas aromáticas.
  • Zona de bañas de jabalíes.
  • Panorámica del molino de Albalate y la torre.
  • “Agujas” en la base de la Cabeza Mediana.
  • Mirador de la Torre sobre los escarpes, meandros y riberas.
  • Ermita de San Roque y torre de Albalate.
  • Riberas con mayor extensión de la sauceda arbustiva y comunidades acuáticas.
  • Escarpes de la Cabeza Mediana.
  • Riberas con mayor expresión de la sauceda arbustiva y comunidades acuáticas.
  • Molino de Albalate.
  • Nogales singulares del Tajuña.
  • Riberas y comunidad singular.
  • Etapas seriales del encinar y sabina albar.
  • Unión del Tajuña y Zebay (también conocido como Lamadre).

Diversa fauna:

Corzos, jabalíes, chovas pelirrojas, collalbas negras, búhos reales, alcones peregrinos y nutrias.

Diversa flora:

Enebros, sabinas albares, salvia, espliegos, rabos de gato, cambrones, chopos, arces de Montpellier, aligustes, endrinos y cornejos

Además, las choperas locales presentan una notable comunidad de hongos, incluidas varias especies de elevado interés culinario como las setas de chopo, los pies azules y las colmenillas.